La Fluoresceína, conocida por su color amarillo flúor y su capacidad para brillar bajo la luz UV, es una excelente opción para productos de limpieza que necesitan marcar la diferencia. A continuación, te contamos por qué este colorante es ideal para tu línea de productos.
Propiedades Destacadas
- Fluorescencia bajo luz UV: Emite una fluorescencia intensa cuando se expone a la luz ultravioleta, ideal para inspecciones visuales y para detectar residuos.
- Alta visibilidad: Su color vibrante y llamativo mejora la apariencia de tus productos, haciéndolos más atractivos y fáciles de diferenciar.
- Fotosensible: Para mantener su calidad, almacénala en envases oscuros o lejos de la luz solar directa. Este cuidado garantiza que su color permanezca intacto.
- Soluble en agua: Se disuelve fácilmente, asegurando que se distribuya de manera uniforme en tus formulaciones líquidas.
Ventajas
- Económica y rendidora: Necesitas muy poca cantidad para teñir grandes volúmenes, lo que la hace muy rentable.
- Versatilidad: Funciona con una amplia gama de productos de limpieza y es ideal tanto para aplicaciones industriales como domésticas.
- Atractivo visual: Añade un toque moderno y profesional a tus productos, haciéndolos destacar en el mercado.
Desventajas
- Fotosensibilidad: Su exposición prolongada a la luz puede degradar el color, por lo que es esencial usar envases adecuados y evitar el sol.
- Limitada en pH extremos: En ambientes de pH muy altos o bajos, puede perder parte de su capacidad fluorescente.
Consejos Prácticos
- Almacénala bien: Usa envases oscuros o guárdala en lugares frescos y lejos del sol.
- Aplicaciones recomendadas: Es ideal para productos que necesitan resaltar residuos o suciedad, como detergentes o limpiadores especializados.
- Aumenta el valor de tu marca: Además de su función práctica, su color fluorescente puede ser un factor diferenciador que capte la atención del consumidor, muy utilizado por la industria automotor